Joan Panisello: un sueño hecho realidad
"Es uno de los grandes proyectos de mi vida". Con estas palabras, el ceramista y profesor Joan Panisello Chavarría (Jesús, 1944) describe la trascendencia del Espai-Museu, situado en el edificio del antiguo Col·legi de la Immaculada, que inauguró este año. Panisello, de una amplía y admirada trayectoria artística, cumple así un sueño.
El antiguo Col·legi de la Immaculada de Jesús tiene un significado especial para el maestro. "Entré a los nueve años como alumno, por lo que me conozco el lugar a la perfección, ya que años después también estuve trabajando como maestro", explica Panisello. Él mismo rememora que "al terminar los estudios de Magisterio, necesitaban un par de personas para echar una mano con los alumnos, porque el colegio había crecido". Una experiencia que, poco después, le brindó nuevas oportunidades. "Más tarde, fui a Sant Jaume a dar clases y dos años después, cuando se creó una nueva clase en el antiguo Col·legi de la Immaculada, me llamaron y regresé. Así que me siento como en casa", afirma el ceramista.
El Espai-Museu alberga una colección de 50 obras y diferentes complementos de la trayectoria del artista. Un espacio de 80 metros cuadrados, en la segunda planta del antiguo Col·legi de la Immaculada, que el ceramista considera como "un obsequio que nuestra familia hace al pueblo de Jesús y a su gente".
El público puede admirar desde las herramientas que ha utilizado Joan Panisello Chavarría hasta una selección de las más de 10.000 muestras de color con las que el ceramista ha trabajado a lo largo de su trayectoria, pasando por encargos hechos por el Col·legi de Periodistes, la URV o incluso Lorenzo Quinn, hijo de Anthony Quinn.
Fruto de la vorágine artística, Panisello tuvo que coger una excedencia en el momento álgido de su carrera, pero continuó disfrutado de la naturaleza. "Vivo rodeado de plantas y de árboles. He tenido la suerte de haber nacido en plena naturaleza y de poder vivir en ella", afirma el artista. Así, la vida de Joan Panisello Chavarría está llena de aventuras, como la de haber tenido la oportunidad de representar a Catalunya y España, en diferentes ocasiones, al otro lado del Atlántico, en Bolivia y Argentina, y también en Europa y los Emiratos Árabes.
Panisello se define como una "cua de sargantana". "Las palabras experimentación e investigación me han acompañado en todas las etapas de mi vida cerámica", asegura el artista, quien incluso llegó a construirse su propio horno de gas que alcanzaba los 1.200 grados de cocción. A sus 78 años, el espíritu de Joan Panisello Chavarría sigue siendo el de ese joven de Jesús entusiasmado por la cerámica y la enseñanza. "Para mí, la palabra más importante del diccionario es estimar, la segunda xalar y la tercera compartir", asegura.